Lecciones de tres casos diferentes.
Ante el aumento de los riesgos para las infraestructuras críticas en el sector de la transmisión de energía, es esencial que las empresas tomen medidas proactivas para salvaguardar sus activos. La electricidad y el suministro de energía se han convertido en una parte indispensable de nuestra vida diaria, alimentando todo, desde nuestros hogares, automóviles, dispositivos y oficinas hasta nuestros hospitales y escuelas. Pero, ¿alguna vez te has parado a pensar en cómo podemos disfrutar de un suministro eléctrico estable y fiable? La respuesta está en la tecnología. Los avances tecnológicos permitieron generarlo, distribuirlo y utilizarlo a gran escala, asegurando un suministro confiable.
Gracias a esta tecnología, ahora podemos dar por hecho que tendremos electricidad disponible siempre que la necesitemos. Podemos alimentar nuestros hogares, cargar nuestros dispositivos y mantener nuestras ciudades funcionando sin problemas sin tener que preocuparnos por la confiabilidad o estabilidad de nuestros sistemas eléctricos. Y a medida que la tecnología evolucione, la electricidad será aún más eficiente, confiable y sostenible.
Sin embargo, la percepción de que el suministro eléctrico es siempre fiable no es una realidad, ya que nuestra dependencia de él crece junto con el consumo de energía. Las consecuencias de una falla en el suministro pueden causar interrupciones, pérdida de ganancias para las empresas, problemas sociales y peligro de vidas. Las empresas que poseen activos dañados pueden enfrentarse a problemas legales, crisis de reputación, investigaciones y sanciones.
Gran parte del área metropolitana de Puerto Rico, el área más poblada de la isla, está sin electricidad en este momento después de una explosión e incendio en una planta de energía en San Juan. Estoy trabajando para obtener más información de @lumaenergypr que aún no ha publicado ningún detalle. pic.twitter.com/3ejpfBIH89
— David Begnaud (@DavidBegnaud) 10 de junio de 2021
Al mismo ritmo, la tecnología también ha impactado en la delincuencia, lo que supone un nuevo riesgo para importantes infraestructuras que podrían comprometer toda la red de transmisión sin tiempo para responder.
En las noticias de todo el mundo nos enfrentamos a diario a noticias como estas:
En junio de 2021 NPR News informó que «Un incendio y un ciberataque causan grandes apagones en todo Puerto Rico», en el pico de este incidente más de 800.000 clientes se quedaron sin electricidad a causa del apagón. Además, la empresa fue golpeada en su sitio web y aplicación móvil; En un comunicado de prensa, la compañía declaró: «Lamenta que sus clientes hayan experimentado los inconvenientes que el ataque puede haber causado y espera continuar brindándoles una experiencia de servicio al cliente excepcional». El gobernador de Puerto Rico se comprometió con las autoridades federales y el FBI a realizar más investigaciones y encontrar al responsable de este ataque.
A medida que crece el suministro de energía en los países en desarrollo, las redes de transmisión se enfrentan a una mayor exposición a condiciones climáticas extremas como el calor, el viento y las tormentas. En un incidente reciente en Costa de Marfil, la explosión de un transformador causó interrupciones en el suministro de electricidad; «Tras la explosión de uno de los transformadores de la subestación CIE 225 Kv, en la noche del pasado lunes, se produjo un incidente que provocó un incendio y una interrupción del suministro de electricidad en determinados municipios de Abiyán y localidades del interior del país».
El Ministro de Minas hizo hincapié en la necesidad de investigar y proteger las infraestructuras de transmisión y distribución de electricidad durante los períodos de mucho calor, y fue claro al respecto: «también es necesario mirar las infraestructuras de transmisión y distribución de electricidad, especialmente durante este período de alto calor, para ver qué hay que hacer para protegerlas mejor».
RESUMEN DE CONSECUENCIAS
Dos casos, con escenarios diferentes pero consecuencias significativas, llevan a la misma conclusión: los sistemas de transmisión de energía son infraestructuras críticas, y las empresas deben evaluar los riesgos y los posibles resultados de los incidentes. La creciente amenaza de las interrupciones físicas, los ciberataques y las condiciones climáticas extremas subraya la necesidad de salvaguardar estos activos clave más que nunca.
Ahora, veamos otro caso en el que la empresa involucrada adoptó un enfoque diferente en la forma en que cuidan sus activos clave.
NamPower, el único operador del sistema de transmisión en Namibia, ofrece un estudio de caso sobre la eficacia de la implementación de medidas preventivas para salvaguardar los activos críticos de la red. Al poner en marcha un plan de gestión de activos y seguir las normas IEC e IEEE para los protocolos de protección y seguridad, pudieron optimizar y agilizar continuamente sus prácticas de gestión de activos. NamPower instaló el TRANSFORMER PROTECTOR (TP) en 2015, para salvaguardar sus activos. La evaluación costo-beneficio de la instalación del TP en sus transformadores mostró que la decisión de instalar el TP en todos los transformadores de subestaciones interiores y de redes estratégicas, así como en reactores ≥40 MVA o con una alta tensión de ≥220 kV, se basó en la aplicación de esta metodología.
Según Gerhard Myburgh de NamPower, «Como resultado, las prácticas y enfoques de gestión de activos para los activos críticos de la red deben optimizarse y racionalizarse continuamente para mejorar y superar los obstáculos planteados por la configuración de la red que aún prevalece en las subestaciones críticas de la red». Siguieron las normas IEC e IEEE para los protocolos de protección y seguridad, y en el año 2000 comenzaron a implementar TP Transformer Protector.
Además, The Guardian ha publicado un artículo que muestra que los documentos filtrados sugieren que Rusia ha desarrollado una serie de herramientas de ciberataque y está involucrada en una carrera armamentista digital con Estados Unidos, Reino Unido, la UE, Canadá, Australia y Nueva Zelanda. Una de las herramientas, un programa de ciberataque llamado Vulkan, se ha relacionado con el grupo de hackers Sandworm, que provocó apagones en Ucrania y participó en la operación rusa para influir en las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Otro proyecto de Vulkan, llamado Crystal-2V, es una plataforma de entrenamiento para ciberoperativos rusos y simula ataques contra una variedad de objetivos críticos de infraestructura nacional. Estos documentos filtrados sugieren que Rusia considera los ataques contra infraestructuras críticas civiles y la manipulación de las redes sociales como una misión para atacar la voluntad de lucha del enemigo.
Estos casos demuestran la importancia de evaluar los riesgos y los posibles resultados de los incidentes y tomar medidas preventivas activas para salvaguardar la infraestructura crítica en el sector de la transmisión de energía. Las empresas deben considerar múltiples factores más allá de los riesgos obvios y tomar medidas proactivas para garantizar la confiabilidad y estabilidad de sus sistemas eléctricos.
El protector de transformadores TP es un dispositivo especializado que protege los transformadores de potencia de fallas externas y ayuda a minimizar el daño y el tiempo de inactividad del transformador. Está equipado con sensores y algoritmos que monitorean varios parámetros eléctricos del transformador, incluidos voltaje, corriente, temperatura y frecuencia, y puede detectar rápidamente condiciones anormales como sobretensión, subtensión, sobrecorriente y fallas internas. Cuando se detectan tales condiciones, el TP desencadena una respuesta inmediata para aislar el transformador de la red eléctrica, evitando daños mayores y minimizando el impacto en el sistema eléctrico.
En conclusión, los transformadores son activos cruciales debido a su importante papel en nuestro sistema de generación, transmisión y distribución de energía. Las fallas o incidentes pueden tener consecuencias más allá del costo de reparación del equipo dañado, y los nuevos métodos de delincuencia y las condiciones climáticas extremas requieren medidas de prevención activa para incendios y explosiones de transformadores. Las evaluaciones de riesgo de los activos clave de transmisión deben tener en cuenta múltiples factores más allá de los riesgos obvios.